TOTAL AUTORIDAD EN EL NOMBRE DE JESUS
Sencillamente les explico lo que la Biblia enseña acerca de la sanidad divina y luego les pido que pongan su nombre en el lugar de la enfermedad y de la forma más simple y calmada les digo: “Sean sanos en el nombre de Jesús” y puedo ver como las sanidades empiezan a ocurrir.
Tenemos un nombre que es sobre todo nombre y tenemos la autoridad de usarlo contra el nombre de cualquier enfermedad.
En Mateo 8 podemos ver un ejemplo de la autoridad que tenemos:
Mateo 8:5-10
5 Entrando Jesús en Capernaum, vino a él un centurión, rogándole,
6 y diciendo: Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, gravemente atormentado.
7 Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré.
8 Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente dí la palabra, y mi criado sanará.
9 Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes soldados; y digo a éste: Ve, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace.
10 Al oírlo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo, que ni aun en Israel he hallado tanta fe.
¿Qué dijo este centurión romano para dejar a Jesús tan admirado?
Dijo estas palabras: “Solo di la Palabra. Así como estoy sobre estos cien hombres que obedecen mis órdenes, Tú fuiste colocado sobre la enfermedad. Tú eres Señor sobre los demonios y las leyes de la naturaleza. Tienes autoridad sobre el dolor y la enfermedad. Solo debes hablar, y los dolores y las enfermedades te obedecerán”.